"No me verás morir". Irma Pineda
En el minuto 05:09 escucharás el poema en voz de su autora
No me verás morir
no podrás olvidarme
Soy tu madre
tu padre
la vieja palabra de tu abuelo [5]
la costumbre de los tiempos
la lágrima que brota de un anciano sauce
la más triste de las ramas
perdida entre las hojas
No me verás morir [10]
porque soy
un cesto de carrizo
donde aún se mueven las tenazas
del papá del camarón
el pescado que Dios comió [15]
la serpiente que devoró un conejo
el conejo que siempre se burló del coyote
el coyote que tragó un panal de avispas
la miel que brota de mis senos
tu ombligo soy [20]
y no me verás morir
Aunque creas que todos se han marchado
no me verás morir
Habrá una semilla
escondida entre los matorrales del camino [25]
que a esta tierra ha de volver
y sembrará el futuro
y será alimento de nuestras almas
y renacerá nuestra palabra
y no me verás morir [30]
porque seremos fuertes
porque seremos siempre vivos
porque nuestro canto será eterno
porque seremos nosotros y tu
y los hijos de nuestros hijos [35]
y el temblor de la tierra
que sacudirá el mar
y seremos muchos corazones
aferrados a la esencia de los binnizá
y no me verás morir [40]
no me verás morir
no me verás
morir
no podrás olvidarme
Soy tu madre
tu padre
la vieja palabra de tu abuelo [5]
la costumbre de los tiempos
la lágrima que brota de un anciano sauce
la más triste de las ramas
perdida entre las hojas
No me verás morir [10]
porque soy
un cesto de carrizo
donde aún se mueven las tenazas
del papá del camarón
el pescado que Dios comió [15]
la serpiente que devoró un conejo
el conejo que siempre se burló del coyote
el coyote que tragó un panal de avispas
la miel que brota de mis senos
tu ombligo soy [20]
y no me verás morir
Aunque creas que todos se han marchado
no me verás morir
Habrá una semilla
escondida entre los matorrales del camino [25]
que a esta tierra ha de volver
y sembrará el futuro
y será alimento de nuestras almas
y renacerá nuestra palabra
y no me verás morir [30]
porque seremos fuertes
porque seremos siempre vivos
porque nuestro canto será eterno
porque seremos nosotros y tu
y los hijos de nuestros hijos [35]
y el temblor de la tierra
que sacudirá el mar
y seremos muchos corazones
aferrados a la esencia de los binnizá
y no me verás morir [40]
no me verás morir
no me verás
morir
o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o
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¡Excelente!
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